BASES CONCEPTUALES
DIVISIÓN DE CIENCIAS Y ARTES PARA EL DISEÑO

 


Contenido

I.  INTRODUCCIÓN
 
CREACIÓN DE LA UNIVERSIDAD AUTÓNOMA METROPOLITANA
ORIGEN DE LA UNIVERSIDAD AUTÓNOMA METROPOLITANA, UNIDAD XOCHIMILCO
LA DIVISIÓN DE CIENCIAS Y ARTES PARA EL DISEÑO
EXPOSICIÓN DE MOTIVOS
 
II.  CARACTERÍSTICAS DEL MODELO DE LA UNIVERSIDAD AUTÓNOMA METROPOLITANA, UNIDAD XOCHIMILCO EN LA DIVISIÓN DE CIENCIAS Y ARTES PARA EL DISEÑO
 
III.  CARACTERIZACIÓN DE LAS PRÁCTICAS DE LOS DISEÑOS
 
LOS DISEÑOS Y SU CONCEPTUALIZACION
PROCESOS DE LOS DISEÑOS   
 
Conceptualización fundamentada
Formalización y prefiguracíon
Materialización y realización proyectual
Aplicación y ejecución
 
IV.  OBJETIVOS DIVISIONALES
 
V.  PERFIL PROFESOR INVESTIGADOR
 
VI.  PERFIL DEL ESTUDIANTE Y DEL EGRESADO
 
VII.  FUNCIONES SUSTANTIVAS
 
INVESTIGACIÓN
DOCENCIA Y DISEÑO CURRICULAR
 
Docencia
Diseño curricular
 
SERVICIO
 
Servicio social
Servicio universitario
Servicio académico
 
VIII.  MULTIDISCIPLINA, INTERDISCIPLINA Y  TRANSDISCIPLINA
 
MULTIDISCIPLINA
INTERDISCIPLINA
TRANSDISCIPLINA
 
IX.  FUNCIONES ADJETIVAS
 
PLANEACIÓN
GESTIÓN
EVALUACIÓN
 
X.  Documentos consultados
 

 


I.- INTRODUCCIÓN

CREACIÓN DE LA UNIVERSIDAD AUTÓNOMA METROPOLITANA

La Universidad Autónoma Metropolitana fue propuesta como una institución comprometida con los cambios que se produjeron en nuestra sociedad, como una institución dinámica y flexible que le permitiera -mediante su organización académica, sus programas docentes, sus actividades de investigación y difusión de la cultura y conforme a los principios de libertad de cátedra e investigación- mantener los canales de comunicación abiertos con el exterior para incorporar las transformaciones de orden científico y humanístico. Como una institución, en suma, que tuviera capacidad para reinterpretarse y adecuarse a la necesidades de una sociedad en permanente evolución.

Con esta concepción el 17 de diciembre de 1973 se publica en el Diario Oficial de la Federación, la Ley Orgánica de la Universidad Autónoma Metropolitana, entrando en vigor a partir del 1° de enero de 1974 y quedando constituida “como organismo descentralizado de Estado, con personalidad jurídica y patrimonio propio.”[1] y teniendo por objeto:

I. Impartir educación superior de licenciatura, maestría y doctorado, y cursos de actualización y especialización, en sus modalidades escolar y extraescolar, procurando que la formación de profesionales corresponda a las necesidades de la sociedad;

II. Organizar y desarrollar actividades de investigación humanística y científica, en atención, primordialmente, a los problemas nacionales y en relación con las condiciones del desenvolvimiento histórico; y

III. Preservar y difundir la cultura.[2]

La Universidad Autónoma Metropolitana es la primera universidad pública y autónoma que se estructura en Unidades académicas y éstas a su vez en Divisiones en donde se reúnen áreas del saber y las actividades operan a través de una organización departamental, dentro de un régimen de desconcentración funcional y administrativa. Esta innovación ha permitido desde su inicio, que cada Unidad desarrolle un modelo educativo propio y flexible, así como experimentar estrategias de formación de nuevas carreras, la adopción de metodologías diversas de trabajo y el impulso de actividades académicas multidisciplinarias, interdisciplinarias y transdisciplinarias.

En cuanto al desarrollo de la investigación y docencia se propuso “...considerar que: la revolución científica y tecnológica ejerce una influencia decisiva sobre el desarrollo de la enseñanza superior en todos sus campos, por lo que es impostergable la revisión de la estructura de los establecimientos pedagógicos, planes de estudio, programas, métodos de instrucción y de las relaciones recíprocas de los aspectos teóricos aplicados.”[3]

La preservación y difusión de la cultura se relaciona con la consideración de que  la universidad debe ser un centro de producción de conocimientos y cultura, por lo que entre sus objetivos se destaca el compromiso de difundir y preservar aquellos elementos que participan de la identidad del país, así como los de carácter universal.

En cuanto a sus formas de gobierno la Ley Orgánica de la Universidad destaca que la estructura de gobierno universitario se compone de dos tipos de órganos: los colegiados que implican a toda la Universidad y son: la Junta de Gobierno, el Patronato y el Colegio Académico; en las Unidades, los Consejos Académicos y para las Divisiones, los Consejos Divisionales. Los órganos personales son: el Rector General, los Rectores de Unidad, los Directores de División y los Jefes de Departamento.

A esta estructura se han incorporado, como instancias de apoyo, la Secretaría General, la Oficina del Abogado General, las Secretarías de Unidad, las Secretarías Académicas, las Direcciones y Coordinaciones Administrativas y de Programas Académicos.

 


ORIGEN DE LA UNIVERSIDAD AUTÓNOMA METROPOLITANA,
UNIDAD XOCHIMILCO

La Universidad Autónoma Metropolitana surge dentro del planteamiento de una reforma integral de la educación en México. En el marco de esta reforma la Unidad Xochimilco busca establecer una nueva correspondencia entre la educación y su articulación con las tareas universitarias de generación, transmisión y aplicación del conocimiento. Esta articulación plantea, necesariamente, nuevas relaciones entre los actores del proceso académico y de éstos con la sociedad.

En consecuencia, el sistema educativo propuesto en el modelo Xochimilco busca nuevas formas de conexión con la vida en los espacios urbanos y en las comunidades rurales, con los distintos sectores, organizaciones e instituciones públicas y privadas, con el fin de indagar soluciones para problemas pertinentes y socialmente relevantes, por medio de una práctica profesional transformadora de la sociedad y comprometida con el desarrollo y aplicación de los distintos conocimientos.

El modelo Xochimilco se estructuró sobre algunas directrices que están consideradas en el texto original intitulado “Anteproyecto para establecer la Unidad Sur de la Universidad Autónoma Metropolitana”, que a la postre se conocería con el nombre de “Documento Xochimilco”. Una de las fundamentales es aquella que concibe a las funciones académicas en una relación de equilibrio e integración. En este sentido, en la docencia se integran la investigación y el servicio; para las finalidades de la actividad investigativa, en la investigación se vinculan las otras funciones; y el servicio.-de igual manera- se conjuga con la docencia y la investigación. Este proceso dinámico permite la retroalimentación permanente de las tareas institucionales.

Asimismo, la integración que busca el modelo Xochimilco se encuentra plasmada en la unidad de las ciencias y las humanidades, de la cultura general con todas sus manifestaciones y la especialización, en la teoría y la práctica del saber y el hacer profesional, así como en las expresiones técnicas y artísticas.

En cuanto a la relación de la universidad con la sociedad, el proyecto Xochimilco tiene una orientación precisa: “...comprometida con las clases mayoritarias de la nación, entendidas en el amplio marco de las fuerzas del cambio democrático y cultural”[4]. Para ello, y con base en los principios conceptuales contenidos en el Anteproyecto para la creación y funcionamiento de la Unidad Universitaria del Sur, la Unidad Xochimilco se plantea redefinir el papel social de la educación superior, según los siguientes aspectos fundamentales: “...la preocupación desde la universidad contemporánea (...) por su articulación en la estructura social, (...) desde la reflexión crítica y la acción creativa. Esta propuesta plantea una revisión profunda de las relaciones entre las ciencias y sus efectos, fundamentalmente la aplicación y la enseñanza y un enfoque novedoso en la metodología educacional, en que el estudiante es el artífice de su propia formación.”[5] En consecuencia, se requiere “...de un cambio del personal formador a fin de que cumpla con las expectativas de un mundo en continuo cambio y renovación.”[6]

Un planteamiento como éste conlleva un conjunto de aspectos relevantes como: ”...la superación de la clásica enseñanza por disciplinas, (que) implica la creación de unidades basadas en un objeto e interrogantes sobre el mismo, donde se conjugan diversas ciencias y técnicas para dar respuestas científicas. La comprensión de que la universidad es un centro intelectual que tiene en sus objetivos, la creación de nuevos objetos culturales, (...) la producción de nuevos conocimientos sobre ciencia y tecnología, el arte y que tiene la obligación de preservar cualquier manifestación cultural del pensamiento, tomando en cuenta las fuerzas sociales determinantes de las formas en que se expresa la creación científica, humanística y cultural”[7].     

 


LA DIVISIÓN DE CIENCIAS Y ARTES
PARA EL DISEÑO

La División de Ciencias y Artes para el Diseño de la Unidad Xochimilco forma parte de un proyecto educativo cuyo punto de partida es la innovación y la integración del conocimiento universitario.

En ese proyecto la División de Ciencias y Artes para el Diseño de la Unidad Xochimilco cerraba el círculo de un saber científico, social y humanístico -que ya proporcionaban las otras Divisiones- con las aportaciones de las disciplinas de los diseños cuyos conocimientos y habilidades son fundamentalmente prácticos, estéticos y tecnológicos. Un saber de este tipo resultaba perfectamente compatible con las ciencias, las humanidades y las disciplinas sociales. En todas ellas el común denominador era el carácter alternativo e innovador del modelo educativo.

Para dar respuesta a esas condiciones, la División de Ciencias y Artes para el Diseño nace a partir de una visión de conjunto y se configura a través de una estructura orgánica de tipo particular. Esta visión de conjunto la proporciona el “proceso de los diseños” y de él se deriva la estructura orgánica de la División.

El proceso general que nos caracteriza está compuesto por cuatro procesos particulares que fueron la base de nuestra estructura departamental:

Es decir, Teoría y Análisis, Síntesis Creativa, Tecnología y Producción y Métodos y Sistemas.

Cada Departamento se constituyó como una parte de un proceso de diseño y al dividirse éstos en áreas de investigación, condujeron a integrarlas al proceso general como elementos de un todo coherente y cohesionado.

La División nace así como una nueva opción educativa para los campos del diseño, adaptando su desarrollo a las transformaciones de la realidad social del momento. Las disciplinas del diseño debían profesionalizarse, sistematizarse y organizarse con base en la concepción innovadora del modelo Xochimilco. Para este fin el “proceso de los diseños” constituyó de nuevo el común denominador de todos los campos profesionales. Adaptar las prácticas del diseño a los procesos sociales de transformación y garantizar un desarrollo interdisciplinario eran los objetivos fundamentales.

Los campos del diseño fueron concebidos como una realidad social específica, cuyas funciones generales y postulados fundamentales eran los siguientes: formar fuerza de trabajo calificada en esos campos de conocimiento, producir conocimientos científicos y tecnológicos en materia de diseño, producir objetos de diseño socialmente relevantes [9], formar diseñadores capaces de contribuir a la transformación de la realidad social, integrar el diseño a la participación interdisciplinaria y reforzar la identificación de sus egresados con los problemas de los sectores mayoritarios.

De ahí que el desarrollo de las disciplinas debía concordar con los nuevos requerimientos del país y con los propósitos de una reforma integral de la educación. Por lo tanto, era indispensable el desarrollo de prácticas universitarias socialmente comprometidas que integraran la generación, transmisión y aplicación de los conocimientos de los diseños. La integración que se buscaba pretendía de esta manera la articulación de las ciencias, las humanidades, la cultura general y la especialización teórica y práctica, así como las expresiones técnicas y artísticas. 

 


EXPOSICIÓN
DE MOTIVOS

La Universidad Autónoma Metropolitana, como universidad pública, enfrenta los embates del modelo de desarrollo neoliberal nacional e internacional que, disminuyendo la autonomía universitaria, le exigen cambios profundos para contribuir voluntaria o involuntariamente a la hegemonía de la economía globalizada. Criterios como la productividad y la eficiencia, remplazan hoy la calidad medida en función de la formación de profesionales críticos que puedan contribuir a la solución de los problemas socialmente relevantes de los sectores mayoritarios del país.

La exigencia de una reforma al sistema educativo nacional y particularmente de la educación superior pública ha sido emprendida por los últimos gobiernos a través de políticas operadas por organismos nacionales e internacionales que promueven la adecuación de estas instituciones a una globalización basada en los intereses del mercado. En nuestro ámbito se pretende reducir, por ejemplo, al estudiante a la simple expresión del oficio de su aprendizaje, descalificando -en consecuencia- la función docente y la relación entre la enseñanza y el aprendizaje. Por lo tanto, los cambios al interior de las propias universidades públicas -tanto en sus políticas, en su estructura, como en los mecanismos de operación- deben favorecer el impulso de su potencial para hacer una defensa razonada de la universidad pública.

Ante la discrecionalidad de la autoridad, la estructura vertical que pesa sobre las actividades sustantivas y adjetivas, la supervisión y el control sobre los académicos y una formación de los alumnos orientada fundamentalmente a la práctica profesional de corte tecnológico, se orientan procesos de diagnóstico (autoevaluación) y mejoramiento que contribuyan a la actualización y construcción permanente de las actividades universitarias, la formación de profesionales críticos, la permanencia del profesor-investigador, el equilibrio entre las funciones sustantivas y adjetivas, la libertad de cátedra. En suma, la orientación hacia lo que dio origen a la creación de esta Universidad y que sustenta el modelo de la Universidad Autónoma Metropolitana y particularmente de la Unidad Xochimilco, dentro de la cual se encuentra la División de Ciencias y Artes para el Diseño. Es en este marco en que se formulan las Bases Conceptuales de la División.  

 


II.- CARACTERÍSTICAS DEL MODELO DE LA UNIVERSIDAD AUTÓNOMA METROPOLITANA,
UNIDAD XOCHIMILCO EN LA DIVISIÓN DE CIENCIAS Y ARTES PARA EL DISEÑO
    

Para la División de Ciencias y Artes para el Diseño, el Sistema Modular de la Unidad Xochimilco se caracteriza por:

1) Ser el marco general dentro del cual se desarrolla el conjunto de actividades académicas de la División.

2) Constituir la forma como se organizan, articulan y desarrollan las tres funciones sustantivas universitarias.

3) Proporcionar a la División una forma particular de organizar el trabajo, la producción y la enseñanza de los diseños.

La producción, la transmisión y la difusión de conocimientos sobre los campos del diseño en la División se llevan a cabo dentro del marco del Sistema Modular que nos caracteriza.

La historia de la División es, entre otras cosas, la historia de los esfuerzos por poner en práctica dicho modelo educativo en los diferentes programas académicos. Cada uno de ellos ha construido su propia versión del modelo a lo largo de la historia.

De acuerdo con el Sistema Modular, la investigación, la docencia, la preservación y la difusión de la cultura no pueden desarrollarse por separado, sino que forman parte de un proceso que los articula como funciones sustantivas.

El proceso se desarrolla de la siguiente manera: la investigación es la actividad preponderante y es en ella donde se producen los conocimientos de los diferentes campos del diseño. En la docencia se transmiten los conocimientos adquiridos o producidos en la investigación tanto por los estudiantes como por sus docentes. A través de la preservación y difusión de la cultura se dan a conocer los conocimientos producidos y transmitidos por las dos funciones sustantivas anteriores. Es por este medio que la División dialoga e interactúa con el resto de la Universidad, otras instituciones y con la sociedad, con el fin de retroalimentar sus campos de acción, los problemas que aborda, las investigaciones que se realizan en las áreas departamentales y sus programas académicos de licenciatura y posgrado.

En el Sistema Modular las funciones sustantivas se desarrollan de manera simultánea. Se convierten en parte de un silogismo que coincide con los tres objetivos fundamentales de la Universidad: transmitir, producir y difundir conocimientos. Las tres funciones sustantivas se articulan alrededor de problemas concretos de diferente origen, nivel y complejidad.

En la División de Ciencias y Artes para el Diseño, el trabajo académico, la enseñanza y la producción de obras, objetos y espacios de diseño se organizan modularmente. Los programas de estudio y sus contenidos académicos se estructuran en módulos, a fin de garantizar la producción integral de conocimientos, obras, objetos y espacios de diseño. Un módulo es una forma de organización y articulación de los conocimientos y de las actividades académicas que se realizan en una unidad de enseñanza aprendizaje a lo largo del trimestre.

El trabajo modular se ordena alrededor de un objeto de transformación o problema complejo de diseño[10] que se desarrolla durante el trimestre a través de diferentes etapas. Cada etapa se define a partir de objetivos de proceso que conducen a la solución integral del problema inicial, enmarcado en sus condiciones histórico concretas. A fin de recortar el problema complejo de diseño y para adecuarlo a los tiempos de operación trimestral, se define un problema eje, que es el verdadero punto de partida de la enseñanza, investigación y producción de diseño del modelo.

Cada módulo está integrado por: un taller de diseño en el que se desarrolla el proyecto o problema; apoyo(s) de teoría e historia y apoyos técnicos que convergen y contribuyen de diferente manera a la solución del problema complejo de diseño. Dichos elementos son los que proporcionan al estudiante los conocimientos, habilidades y actitudes que requiere para su formación integral.

Los objetivos fundamentales de cada módulo son, entre otros, los siguientes: la integración de los conocimientos; la articulación de teoría y práctica; la puesta en aplicación de los conocimientos, habilidades y actitudes; la solución de problemas concretos de diseño, de diferentes niveles de complejidad, así como el fomento al trabajo interdisciplinario y la formación crítica y propositiva de los estudiantes, quienes de esta manera, están en posibilidades de contribuir a la transformación de la realidad social en la que viven.

 


III.- CARACTERIZACIÓN
DE LAS PRÁCTICAS DE LOS DISEÑOS

En las condiciones actuales, la vida de las prácticas profesionales de los diseños no está garantizada. Ellas enfrentan un sinnúmero de problemas y contradicciones que estaban presentes desde el inicio mismo de su constitución como disciplina, pero que ahora se han convertido en obstáculos para su renovación y desarrollo.

Se trata de una serie de insuficiencias y de indefiniciones que con el tiempo, acabaron desfigurando los objetivos fundamentales de las prácticas profesionales. Hagamos mención de algunas de estas tendencias desnaturalizantes.

En primer lugar, lo que podríamos llamar una ubicación socialmente imprecisa de las prácticas del diseño ha dado lugar a una subvaloración profesional de las diferentes disciplinas, incluida recientemente la arquitectura. A pesar de que la actividad proyectual del diseño está presente en casi toda la vida individual y colectiva de las personas (objetos, imágenes, mercancías, espacios habitables), los diseñadores no gozan aún hoy día de suficiente reconocimiento social. Todavía no se sabe si los diseños son una estética aplicada, un arte industrial, un arte del presente, una ingeniería bella, una forma útil, una profesión científica o una técnica de comunicación.

Lo mismo sucede con los perfiles profesionales de los diseñadores, a excepción del arquitecto. Cada uno de ellos articula y desarrolla conocimientos, habilidades y actitudes que forman parte también de otras disciplinas (fotógrafo, editor, dibujante, ilustrador, artista) sin acabar de ser ninguno de ellos, por supuesto. Las fronteras mismas de las disciplinas siguen siendo imprecisas, por lo que requieren aplicarse en nuevos campos profesionales y de conocimiento que intervengan en la actividad proyectual de los diseños para transformarse.

En segundo lugar, las disciplinas de los diseños nacen con una orientación eminentemente práctica y se desarrollan a partir de una confianza desmedida en la creatividad y en la capacidad inventiva de los profesionistas de los diseños. Pronto la orientación práctica se convirtió en un verdadero pragmatismo sustentado hasta hace algunos años en el misterio de la caja negra.

La insuficiencia teórica, conceptual y metodológica se volvió el común denominador de las prácticas de los diseños. En su lugar se dio una importancia inmoderada al conocimiento y manejo de algunos lenguajes formales que acabaron convirtiéndose en el sustituto de cualquier actividad reflexiva. La sombra del formalismo, desde entonces, no ha dejado de oscurecer el desarrollo de toda la parte conceptual y de aplicación de los diseños.

En tercer lugar, todo lo que se relacionaba con el trabajo de investigación en los campos de los diseños fue dejándose de lado. Resultaba innecesario sistematizar las teorías, metodologías, conocimientos y experiencias anteriores, por la confianza a la creatividad y al formalismo que dominó a las prácticas profesionales durante muchos años.

La madurez que proporciona la sistematización de los conocimientos, de los problemas, metodologías y procesos de trabajo, ha arribado lentamente a los campos del diseño, puesto que en lugar de un esfuerzo sostenido en la investigación, se dio libre curso a la generación espontánea de los diseños. De ahí el atraso en los estudios de posgrado que caracteriza a casi todos los programas universitarios del país. Posgrados que en el caso de existir, y por su carácter profesionalizante, sólo servían para suplir deficiencias en los estudios de licenciatura.

En cuarto lugar y como consecuencia de lo anterior, la enseñanza de los diseños fue muy desigual y poco profesionalizada. Los contenidos educativos de los programas de estudio siguieron una clara orientación práctica y técnica y, con excepción de algunos casos, no proporcionaban una formación integral (teórica, práctica) a sus estudiantes. El pragmatismo, formalismo y tecnicismo se impusieron en el desarrollo desigual de las prácticas  profesionales. La falta de interés en la enseñanza de los diseños por problemas concretos y por procesos (conceptualización, materialización, formalización, aplicación) es la mejor muestra de una orientación dominada por la intuición y el genio creador.

Cuando, en quinto lugar, los sistemas y procesos tecnológicos ligados a la información y a la comunicación alcanzaron hace más de una década un desarrollo exponencial y ocuparon la escena de algunas prácticas profesionales, las disciplinas de los diseños no pudieron hacer nada para evitar el asalto de la práctica descalificadora. La técnica se volvió un fin en sí mismo y pasó a ocupar el papel preponderante. Hoy día la elaboración de obras, objetos, espacios e imágenes de diseño está totalmente sujeta a la utilización de la computadora y a los modelos de simulación que se han convertido en el lenguaje (numérico) de los diseños. El avasallamiento de las prácticas profesionales por los sistemas tecnológicos es cada día mayor y nada parece detener el rumbo. Cualquier utilización crítica y cualquier argumento histórico, social o cultural salen sobrando ante el uso indiscriminado de los sistemas tecnológicos descalificadores.

A todo ello se debe la difícil inserción de egresados de los diseños en campos de trabajo alternativos. Porque son estudiantes que han sido formados sin una visión orgánica y crítica de su profesión, que no han tenido que enfrentar problemas concretos de diseño, que no han pasado por una integración de sus conocimientos, por una articulación de la teoría y la práctica, y por un acercamiento a otras disciplinas auxiliares. Sólo saben dar respuestas inmediatas, salpicadas de estética y de funcionalismo, pero no conocen ni la historia de su propia disciplina y no saben tampoco conceptualizar, formalizar, materializar, planear estrategias o desarrollar proyectos concretos. Elaboran diseños en abstracto, como si ninguna circunstancia histórica, social y cultural los rodeara, como si ningún otro conocimiento científico, tecnológico y humanístico hiciera falta a su “genio creador”. Repiten, imitan, ignoran y se enredan en una práctica profesional que gira en redondo.

Es este tipo de práctica profesional la que se encuentra bajo amenaza y su existencia futura no está garantizada. La época actual necesita de otra práctica profesional de los diseños. Necesita una elaboración más coherente, sistemática y profesional de las obras, objetos, espacios e imágenes de diseño cuantitativa y cualitativamente mejor y más desarrollada, más compleja y sustentada en un manejo integral de la práctica profesional. Necesita un diseñador actualizado y conocedor de su disciplina, con capacidad para conceptualizar, formalizar, materializar y aplicar sus ideas, con capacidad para resolver problemas de diseño con distintos niveles de complejidad, y que cuente con los conocimientos teóricos y prácticos que hoy día requiere la producción de objetos, productos, mercancías y comunicaciones con sentido. Necesita un diseñador con una visión orgánica de su profesión, con conocimientos provenientes de otras disciplinas (científicas, tecnológicas, humanísticas) y capaz de insertarse en equipos profesionales de trabajo en igualdad de condiciones. Necesita un verdadero profesional de los diseños con estudios de posgrado, con capacidad de investigación y con posibilidades de dar respuestas complejas e integrales a los problemas que le plantea la época en la que se encuentra.

Revalorar los procesos teóricos y conceptuales, sistematizar los aspectos metodológicos y de planeación de los diseños, fomentar la investigación formal e intensiva, impulsar los estudios de posgrado, acotar el uso indiscriminado de la tecnología a los criterios de la sustentabilidad ambiental; reforzar el conocimiento histórico de las disciplinas, son algunos de los caminos a seguir para profesionalizar las prácticas profesionales. De la misma manera lo son la enseñanza de los diseños por problemas concretos y por procesos, la investigación de los conocimientos, la articulación teoría y práctica y el fomento al saber interdisciplinario y transdisciplinario, así como el trabajo en equipos.

 


LOS DISEÑOS
Y SU CONCEPTUALIZACION

El diseño es una actividad teórico-práctica de carácter proyectual que conduce a la elaboración de obras, objetos, espacios e imágenes pertinentes y de calidad, en respuesta siempre a demandas o necesidades de la sociedad. Es una actividad con alto grado de complejidad, en la que intervienen para su desarrollo, factores de diferente origen y significación: socio-económicos y culturales, ambientales, psicológicos, conceptuales, formales, tecnológicos y técnicos que se articulan de diferente manera en su desarrollo y elaboración.

El diseño se realiza siempre a través de procesos que orientan y organizan los diferentes factores que condicionan o determinan la elaboración de los productos.

De todos los procesos que intervienen en la actividad de los diseños se subrayan aquí aquellos que nos parecen fundamentales, para caracterizar a los diferentes programas académicos de nuestra División:

El orden que establecen entre sí, depende de las características que los factores ya referidos plantean al problema concreto de diseño.

El proceso general de diseño y los procesos particulares que lo componen, cobran cuerpo y se organizan a través de proyectos concretos que se llevan al cabo para dar respuesta a las diferentes demandas.

 


PROCESOS
DE LOS DISEÑOS

Los procesos de los diseños son diversos pero históricamente hay uno que nos caracteriza como División. Su definición se enraíza en la propia estructura departamental que tenemos, en nuestros documentos fundamentales y en los diferentes programas académicos que nos dan identidad.

El proceso general articula y da sentido a los siguientes procesos particulares:

Durante muchos años, consideramos que el proceso general se desarrollaba siempre de la misma manera y que había un recorrido lineal y unívoco previamente establecido.

Sin embargo, hoy día nuestra visión del proceso es más flexible. Es factible recorrer dicho proceso en todas direcciones y siempre de manera particular, de acuerdo con el problema integral de diseño y enmarcado en sus relaciones históricas. El desarrollo lineal ha dejado su lugar a múltiples recorridos en un modelo de coordenadas formado por los procesos particulares.

El recorrido puede empezar en cualquier parte de los procesos particulares y se desarrolla como un camino crítico que depende de las características del problema de diseño al que se intenta dar respuesta. Lo importante es que toda investigación, proyecto o enseñanza de diseño recorra los cuatro procesos, porque de ello depende la perspectiva integral que caracteriza al proceso general de la División.

El diseño es concebido en este proceso como la experiencia integral de múltiples facetas que los miembros de la comunidad deben recorrer, sin importar si se trata de una investigación, de la enseñanza o la producción de una obra, un objeto, una imagen o un espacio de diseño. Sin importar tampoco si es una actividad educativa, teórica, práctica, técnica o actitudinal. El punto de partida y el de llegada del proceso general es en todos los casos, el problema concreto de diseño y su posible solución con base en las determinaciones de una realidad cambiante, dinámica y controvertida.

Los cuatro procesos particulares que componen al proceso general de diseño de la División en nuestro modelo educativo se definen de la siguiente manera:

Conceptualización fundamentada

En este proceso se articulan los factores condicionantes y determinantes de la producción del diseño. Por factores condicionantes entendemos aquellos elementos que se relacionan con el contexto socio-económico, político, cultural e ideológico del diseño. Factores determinantes son los que se relacionan con los aspectos históricos y del medio ambiente natural y creado de las propias disciplinas. En la conceptualización fundamentada se procesan todos estos factores contextuales como aproximación a la formalización del diseño.

Formalización y prefiguracíon

Este proceso es la actividad en donde se articulan todos los aspectos expresivos, de representación y de lenguaje de los diseños. En la formalización se organiza y da coherencia a todos los componentes formales del diseño: espacio, composición, estructura, proporción, dinámica, simetría, lenguajes y morfologías.

La formalización traduce y convierte todos los elementos que le proporcionan la conceptualización fundamentada, la formalización y prefiguración, la materialización y realización proyectual y la aplicación y ejecución del diseño. Convierte en lenguaje de diseño todos los elementos que intervienen en el problema al que se intenta dar respuesta.

Materialización y realización proyectual

Este proceso organiza y articula todos los factores técnicos y los aspectos materiales y objetuales del diseño, con los aspectos de la formalización, donde se organizan los elementos físicos que intervienen directamente en la producción concreta de las obras, objetos y espacios de diseño. Convierte todos los elementos que intervienen en el problema al que se intenta dar respuesta, en parte del proceso de su producción.

Aplicación y ejecución

En este proceso se articulan todos los aspectos que se relacionan con las demandas y necesidades de la sociedad: el usuario, la producción, la distribución y el consumo de obras, espacios y objetos de diseño. La aplicación y ejecución organizan todos los procesos anteriores a fin de garantizar la eficiencia y pertinencia de los productos, objeto de la actividad de los diseños.

 


IV.- OBJETIVOS
DIVISIONALES

Los objetivos fundamentales de la División de Ciencias y Artes para el Diseño son los siguientes:

1. Impartir modularmente conocimientos, habilidades y aptitudes de manera crítica y propositiva en sus modalidades escolar y extra escolar, procurando que la formación de sus egresados corresponda a las necesidades sociales.

2. Organizar y desarrollar actividades de investigación en los diferentes campos de diseño con un carácter interdisciplinario y transdisciplinario, en atención, primordialmente, a los problemas nacionales y en relación con las condiciones del desenvolvimiento histórico.

3. Preservar y difundir la cultura relacionada con los campos del diseño y producida tanto dentro como fuera de la División.

4. Procurar un desarrollo orgánico de los tres objetivos anteriores, en todas y cada una de las actividades de la División.

 


V. PERFIL
PROFESOR INVESTIGADOR

Es un profesor con alto grado de formación académica y/o  una amplia experiencia profesional, en materia de transmisión, generación y difusión de conocimiento y elaboración sustentada de productos de trabajo académico (publicaciones, modelos, prototipos, referentes, marcas, derechos de autor...) Capaz de generar o construir conocimiento colectivo preferentemente interdisciplinario, impartir una docencia de calidad a nivel de licenciatura y posgrado y participar en programas de preservación y difusión de su trabajo académico. Un profesionista integral que contribuye con su trabajo al avance y consolidación del conocimiento científico, artístico, tecnológico y humanístico en los campos de los diseños y que participe de manera sustantiva en la evaluación y actualización de los planes y programas de estudio.

El profesor-investigador debe considerar las necesidades de investigación, docencia y preservación y difusión de la cultura, articulándose al trabajo colectivo de los ayudantes de investigación, asistentes, asociados y titulares.

El profesor investigador debe ser capaz de generar de manera colectiva, nuevos conocimientos a través del desarrollo y transferencia de un campo nuevo de conocimiento que incluya en lo posible a todos los diseños y los conocimientos de frontera.

El profesor investigador de la División de Ciencias y Artes para el Diseño deberá tener un compromiso explícito con los problemas socialmente relevantes de la sociedad a través de las actividades académicas desarrolladas en las funciones sustantivas de la Universidad.

El profesor investigador será guía, conductor y coordinador de los procesos de enseñanza aprendizaje, así como constructor de conocimientos al transmitir como docente conocimientos de frontera.

El profesor investigador de la División de Ciencias y Artes para el Diseño debe poder transitar por los diferentes campos del conocimiento del diseño, además de tener una actualización permanente que le permita adaptarse a los cambios necesarios de una sociedad en constante evolución.

El profesor investigador de la División, en su trabajo académico, respetará la identidad y diversidad cultural, ideológica y política de los otros, siempre con un sentido incluyente.

 


VI. PERFIL DEL ESTUDIANTE
Y DEL EGRESADO

La División de Ciencias y Artes para el Diseño -a través de sus planes y programas académicos de licenciatura y posgrado- fundamentados en los documentos básicos de la UAM-Xochimilco[11], define los perfiles de sus estudiantes y egresados como diseñadores con actitud crítica, propositiva y creativa, caracterizada por la racionalidad científica y la sensibilidad artística.

El proceso de enseñanza-aprendizaje en Ciencias y Artes para el Diseño procura una formación sólida e integral que incluye aspectos científicos, tecnológicos, humanísticos y artísticos, con el fin de contribuir a la solución de los problemas socialmente relevantes, pertinentes y vigentes con diversos grados de complejidad y en una realidad cambiante, para la búsqueda de una mayor calidad de vida para la población de nuestro país. Esto exige del estudiante y del egresado un trabajo interdisciplinario y en equipo, así como de un trabajo sólido individual, para resolver los problemas a que se enfrentará en la práctica profesional.

Este proceso de formación se articula a partir de los objetos de transformación, donde los estudiantes ponen en juego sus conocimientos para la construcción colectiva del conocimiento. La integración de la teoría y la práctica se convierte en el elemento esencial que permite dar direccionalidad a sus saberes, actitudes, competencias y aptitudes, manejando los diferentes lenguajes del diseño, sus recursos formales y técnicos.

Los esfuerzos educativos de la División de Ciencias y Artes para el Diseño están orientados para que sus estudiantes y egresados tengan una visión integral de su profesión y comprendan y apliquen múltiples procesos de diseño desde variadas ópticas donde puedan elegir, entre las diferentes concepciones, la más adecuada para la solución de un problema en los diversos mercados de trabajo. Estos esfuerzos también se encaminan para que los estudiantes y egresados tengan la capacidad de adaptación a los cambios, la versatilidad en su disciplina y tomen conciencia de los problemas de su profesión y cómo solucionarlos

Los egresados deben estar en condiciones de aplicar, en su práctica profesional, los conocimientos teóricos y prácticos para abordar los problemas concretos de su tiempo y espacio en su disciplina, tomando en cuenta los campos de conocimiento de frontera del diseño[12], de manera multidisciplinaria, interdisciplinaria y transdisciplinaria.

En consecuencia con lo anterior, los egresados estarán en condiciones de producir conocimientos en los diferentes campos de diseño, tanto para la solución de problemas concretos de diseño como para la contribución de nuevos paradigmas en los procesos de investigación y desarrollo, en las ciencias y las artes para el diseño, respondiendo de manera idónea de acuerdo al nivel escolarizado del egresado.

Desde su proceso de formación, el egresado de la División de Ciencias y Artes para el Diseño de la Unidad Xochimilco, debe ser consciente de que su permanente preparación es una de las más importantes acciones para desarrollo de su vida profesional.

Finalmente, el egresado deberá obtener el reconocimiento social con base a los conocimientos adquiridos durante su proceso de formación.

 


VII. FUNCIONES
SUSTANTIVAS

INVESTIGACIÓN

En la División de Ciencias y Artes para el Diseño la investigación debe convertirse en la función articuladora del total de las actividades académicas y orientar la vida universitaria, de manera que se arribe a una visión orgánica de las tres funciones sustantivas.

Así, la consolidación de la División requiere hacer la distinción entre los diversos modos de realizar actividades investigativas y la investigación en estricto.

La investigación en los campos del diseño presenta una serie de características que le asemejan a la realizada en otras disciplinas o campos de conocimiento y al mismo tiempo, le distinguen. Actualmente, en la División la investigación en diseño tiene un carácter eminentemente práctico, por el uso y destino que se le da a los conocimientos adquiridos.

En este sentido, la investigación que se realiza preferentemente en la División de Ciencias y Artes para el Diseño debe reconocer y superar el carácter experimental, descriptivo, básico y aplicado, empírico, no sistematizado y con escasos recursos teóricos, metodológicos y conceptuales para acceder a una investigación formal, sistemática e intensiva, que utilice métodos, instrumentos y procedimientos de análisis que permitan dar cuenta de la complejidad de los procesos y de respuesta integral a los problemas que se plantea y genere campos de conocimiento de frontera.

Una investigación que analice los aspectos conceptuales, formales, materiales, técnicos y de aplicación de los fenómenos y procesos de diseño en el marco de la realidad imperante y sus posibles transformaciones. Que se desarrolle a través de programas divisionales y proyectos que respondan a necesidades sociales congruentes con el carácter público de nuestra institución.

Una investigación planteada así permitirá el desarrollo y transformación de las disciplinas y campos de conocimientos de los diseños. Sólo ella hará efectiva una articulación de las tres funciones sustantivas de nuestro quehacer universitario. De esta manera, la investigación debe dar sentido a la actividad docente y a la difusión de los conocimientos, generando –además- una gestión universitaria que responda a criterios académicos.

El marco de reconocimiento, fomento y organización de la investigación estaría dado por las diferentes formas que esta función adquiere en la División:

· Investigación empírica y experimental (proyectos de diseño, materiales didácticos, trabajo de campo, prototipos...)

· Investigación analítico descriptiva (básica, aplicada, por demanda)

· Investigación sintético propositiva (pura y fundamental)

La diferencia de estos tres tipos de investigación no es valorativa ni excluyente. Sólo establece niveles de complejidad, sistematización y desarrollo. Si bien todos se consideran trabajo investigativo, la investigación sintético-propositiva es la que integra los demás tipos, la de mayor alcance en la generación de conocimiento y debiera ser el objetivo a seguir por cada uno de los programas y proyectos investigativos de la División.

 


DOCENCIA
Y DISEÑO CURRICULAR

Docencia

La División de Ciencias y Artes para el Diseño desarrolla una educación innovadora en el marco del modelo pedagógico de la Unidad Xochimilco, cuyas características fundamentales para abordar el proceso de enseñanza-aprendizaje son:

· La integración de conocimientos

· El aprendizaje a través de problemas

· El permanente contacto con los procesos de la realidad social

· La articulación de la teoría y la práctica

· Su carácter flexible

· El estudiante como partícipe activo de su formación

· La investigación como base del proceso

· La investigación como la función que propicia la integración de la docencia y el servicio

· El docente como guía, conductor y coordinador del proceso

· La puesta en aplicación de los conocimientos.

El carácter innovador de la docencia en la División de Ciencias y Artes para el Diseño se debe a que la articulación y desarrollo de estas características modifican los procesos de enseñanza-aprendizaje en favor de que el estudiante sea el artífice de su propia formación. Las funciones de los actores que participan en el proceso, el desarrollo de un aprendizaje por procesos[13] y la visión de una respuesta siempre a problemas concretos de la realidad, es lo que permite la superación de los marcos disciplinarios tradicionales.

La flexibilidad del modelo no se limita a la elección que el estudiante pueda hacer de sus propias unidades de enseñanza-aprendizaje, sino que interviene directamente en las diferentes etapas de dicho proceso: prioridad de los procesos de aprendizaje en los que se beneficia el propio docente, una participación más activa del estudiante, la superación de las relaciones de dependencia y el impulso a la interacción horizontal entre los actores del proceso.

Una buena parte de la actividad docente de la División no se desarrolla conforme al Sistema Modular. Por tanto, la División requiere de un esquema intermedio entre el modelo fundador y la realidad concreta que ha desarrollado. Dicho esquema deberá sustentarse en una apuesta académica que responda al conjunto de condiciones y tendencias en que se desarrollan los procesos de enseñanza-aprendizaje en la educación superior de México y el mundo.

A nivel mundial, los procesos de enseñanza-aprendizaje están determinados por cuatro realidades:

1. El desarrollo de la sociedad de la información y del conocimiento

2. El desarrollo exponencial de los sistemas tecnológicos

3. El paradigma de la complejidad en el saber y

4. La prioridad a los procesos de aprendizaje.

En este sentido, la apuesta en la docencia prioriza los procesos de aprendizaje del estudiante, de manera que sea capaz de adquirir y construir conocimientos permanentemente, desarrollar competencias teóricas y prácticas, superando aquéllos sujetos a la enseñanza tradicional por asignaturas y caracterizada por la desarticulación de los conocimientos y desvinculación de los problemas reales e históricamente determinados.

En el caso de la División de Ciencias y Artes para el Diseño, la actividad docente estará orientada por los procesos de aprendizaje. Todas las actividades (enseñanza y aprendizaje, investigación y servicio) son igualmente importantes, porque algunas habilitan, otras vinculan, mientras que otras más vuelven competente y en conjunto propician la comprensión y visión de conjunto de la práctica profesional. Cada una interviene en la solución de problemas, construcción de información, saberes y conocimientos indispensables para la apropiación de una práctica profesional compleja e integral, comprometida socialmente. Por lo tanto, cada una de las actividades docentes se organizan y operan de manera orgánica al modelo.

Diseño curricular

El diseño curricular en la División es un componente estratégico para su desarrollo, debido a que en una concepción innovadora de los procesos de enseñanza-aprendizaje “cada propuesta curricular es una forma de articulación de la Universidad con su medio ambiente. En la Unidad Xochimilco, la teoría curricular expresa las prioridades de la política universitaria en relación con campos de transformación asociados al ejercicio de las prácticas profesionales.”[14]

El diseño curricular de planes y programas de estudio debe restablecer y renovar las relaciones del trabajo académico de la División con la sociedad y con las diferentes prácticas profesionales de los diseños. Para ello se requiere que dichos planes y programas sean vigentes, pertinentes y relevantes.

A través del diseño curricular se debe actualizar el perfil del egresado en los diferentes campos del diseño, para que se adapte a los requerimientos de una sociedad en constante transformación y sea capaz de contribuir a la modificación de su práctica profesional.

El diseño curricular, cuyo punto de partida será el perfil del egresado que se pretende formar, concreta las políticas académicas de la División en materia de docencia, investigación y servicio. Además tendrá siempre un carácter integral y será realizado de acuerdo a los postulados del Sistema Modular que caracteriza a la Unidad Xochimilco.

 El diseño curricular deberá estar sujeto a revisiones y actualizaciones periódicas, a fin de que se corresponda con las condiciones socio-históricas que le dan significación.

Los planes y programas de estudio, producto del diseño curricular, deberán reforzar los procesos de aprendizaje del estudiante a través de proyectos basados en problemas concretos de la realidad que estimulen la vinculación, en donde estén claramente establecidas las finalidades de cada actividad académica, los objetivos de proceso que conducen a respuestas observables y en donde el trabajo de investigación ocupe un lugar esencial.

 


SERVICIO

En la División de Ciencias y Artes para el Diseño se parte del postulado de que el servicio debe formar parte de los planes y programas de estudio, articulándose a una visión orgánica de las actividades sustantivas de la universidad y adquiriendo -en cuanto conocimiento- plena significación social.

El servicio en la División “...constituye el medio a través del cual la Universidad dialoga con la sociedad y crea una importante vía de expresión de las necesidades sociales a las que la Universidad debe responder; mediante él, la Universidad realiza los ajustes internos que tal cumplimiento implica.”[15]

En la División el servicio, en su concepción más amplia, se caracteriza por:

· Propiciar la aplicación de conocimientos, habilidades, competencias y actitudes críticas propias del trabajo universitario

· Favorecer una labor que potencia, permitiendo evaluar y, a su vez, sirviendo de referente para el desarrollo de las funciones sustantivas

· Estimular una actividad que propicia el entendimiento y desarrollo interdisciplinario del conocimiento de la realidad

· Mantener y potenciar la interacción con la sociedad de la que la sociedad y la universidad deberán beneficiarse.

· Hacer explícita la responsabilidad de la División con la nación y la sociedad, extendiendo los alcances del trabajo universitario

· Hacer coincidir la formación de profesionistas con un servicio a la sociedad.

Para cumplir cabalmente con esta función, la División comprende diversos tipos de servicio, cada uno de los cuales deben ser planeados, organizados y evaluados de manera particular, sin que se pierda el carácter orgánico del modelo educativo.

Servicio social

Mediante el servicio social el estudiante le retribuye al país parte del saber adquirido durante su proceso de formación.

Servicio universitario

A través del servicio universitario y de acuerdo a los modelos de servicio que establecen los planes y programas de estudio, la División proporciona a la sociedad los productos del trabajo universitario.

Servicio académico

Son los proyectos que la División desarrolla con base en demandas de la sociedad y que deben retribuirle recursos complementarios.

 


VIII.- MULTIDISCIPLINA,
INTERDISCIPLINA Y  TRANSDISCIPLINA

Para la División de Ciencias y Artes para el Diseño, una de las formas más significativas de abordar los problemas de los diseños se da a partir de la multidisciplina, la interdisciplina y la transdisciplina, las cuales se presentan en un entramado de relaciones que cruzan las funciones sustantivas de la División, la docencia, la investigación y el servicio. Asimismo, estas formas de trabajo cruzan los procesos de enseñanza aprendizaje de licenciatura, maestría y doctorado.

Igualmente lo hacen con la investigación, cuando se realizan proyectos inter-áreas, inter-departamentales, inter-Unidades y con otras Universidades e Institutos de investigación y desarrollo locales, nacionales e internacionales.

En el servicio se dan igualmente estas formas de trabajo que trascienden lo disciplinar, para dar respuestas más adecuadas a realidades cada vez más complejas.  

Para lograr esa articulación, es importante conocer, qué entendemos por cada uno de estos conceptos.

MULTIDISCIPLINA

La multidisciplina es el conjunto de conocimientos en torno a los campos del diseño (Diseño de la Comunicación Gráfica, Diseño Industrial, Planeación Territorial y Arquitectura) que comparten los procesos de significación y comunicación, de prefiguración y materialización en la práctica de los diseños.

INTERDISCIPLINA[16]

La interdisciplina es el proceso de interacción y diálogo del campo de conocimiento de los diseños con los de las otras ciencias que les permite explicar los fenómenos de la realidad desde distintos enfoques de manera simultánea.

Esta forma de trabajo será la prevaleciente en los procesos de enseñanza-aprendizaje con énfasis en la licenciatura, donde se realiza un trabajo por problemáticas y no por objetos. El trabajo académico por problemáticas es el que posibilita los contenidos y enriquece la formación del diseñador.

TRANSDISCIPLINA

La transdisciplina se entiende como el proceso ya no sólo de confluencia de los conocimientos de las distintas disciplinas, sino como el proceso que atraviesa al fenómeno investigativo y lo explica permitiendo generar conocimientos nuevos. Ésta se refiere específicamente al campo del investigador y de la formación en el posgrado.

 


IX.- FUNCIONES
ADJETIVAS

La gestión, planeación y evaluación en la División de Ciencias y Artes para el Diseño forman un proceso integrado, debido a la estrecha interrelación y articulación existente entre sus presupuestos y componentes. Su importancia radica en que constituyen instrumentos fundamentales para coadyuvar al carácter orgánico de las funciones y tareas universitarias, armonizándolas entre sí con la estructura universitaria y el entorno a quien se debe.

Todas y cada unas de las actividades académicas de planeación, gestión y evaluación en la División tendrán un carácter orgánico y deberán de desarrollarse de manera conjunta. Es decir, el trabajo de planeación académica realizado por la Dirección de la División, sus departamentos, las carreras e instancias de apoyo deberá ser llevado acabo en armonía con el resto de la División,  tomando siempre en cuenta los beneficios de un desarrollo orgánico de la vida universitaria.

La gestión, planeación y evaluación, como lo mencionamos, comparten concepciones generales comunes, que en la siguiente exposición no se repetirán para evitar reiteraciones.

PLANEACIÓN

La Universidad Autónoma Metropolitana otorga a la planeación universitaria un carácter estratégico. Es por ello que la ubica de manera fundamental dentro de su marco normativo y reglamentario, así como en la distribución de funciones y competencias.

La planeación divisional se entenderá como un proceso sistemático y continuo que permita la visualización objetiva del futuro, considerando su contexto, pasado y condiciones presentes, teniendo como estrategia la base de la racionalización de los recursos, considerando lo cambiante del contexto y las adecuaciones necesarias de lo general a lo particular; todo ello a través de un diagnóstico que permitirá prever los recursos y programarlos para un mejor desempeño de las actividades.

Nuestra concepción será orientadora mediante el trazado de líneas previstas, consensuadas y racionales. Permitirá también reducir la brecha entre la operación real y la deseada. Posibilitará, asimismo, la adecuada integración de las funciones universitarias. Esto es particularmente importante en el caso del modelo educativo de nuestra División, ya que al concebirse como innovador en sus planteamientos e hipótesis, requiriere de una estrategia y definición de secuencias que permitan retroalimentar las funciones sustantivas de la Institución.

La planeación tendrá que ser flexible a corto, mediano y largo plazos, con el fin de alcanzar el objeto que se propone la División y se implementará mediante políticas, objetivos, metas, prioridades, estrategias y criterios de evaluación (Plan de Desarrollo Institucional, Políticas Generales, etcétera). Todo ello a través de un marco normativo y axiológico, con una aproximación diagnóstica que permita definir y jerarquizar lo anterior y la evaluación del conjunto de actividades.

Para que la planeación se pueda realizar, se deberá contar con un sistema eficiente de información que promueva su difusión de manera vertical y horizontal, posibilitando así que la misma sea de mayor acceso, objetividad, sistemática y actualizada, permitiendo su uso, manejo y difusión.

GESTIÓN

Si bien la Universidad Autónoma Metropolitana cuenta con una estructura de gestión universitaria moderna y desarrollada, fundamentada en la concepción central de la desconcentración funcional y administrativa, dentro del modelo Xochimilco la conducción universitaria se vuelve particularmente compleja en la División de Ciencias y Artes para el Diseño, debido a las prácticas y tradiciones disciplinarias de algunos campos del diseño. 

La juventud de la Universidad y especialmente en los ámbitos del diseño, se ha atendido lo urgente e inmediato, postergándose lo necesario. Pareciera ser éste el caso de la gestión universitaria.

Por ello, debe superarse la confusión y sobreposición de competencias, la falta de clarificación e invasión de las mismas, superándose la incapacidad para asumir responsabilidades de gestión, incluso elementales.

La gestión universitaria se ha caracterizado por tener una dinámica en su ejercicio de arriba hacia abajo, sin presentarse la necesaria contraparte de flujo de “abajo hacia arriba” y en sus niveles intermedios lo que podría permitir el “subir” de las células académicas (equipos de investigación, grupos académicos, etcétera) hacia las áreas de investigación, coordinaciones y otras instancias de gestión pertinentes. Este mismo hecho se presenta en las prácticas de gestión representativas, donde no es común asumir iniciativas de las bases hacia sus representaciones colegiadas y ni siquiera la rendición de cuentas.

Probablemente esto se explique, entre otros motivos, por la carencia de una “tradición” de participación de muchos alumnos y docentes previa al ingreso a la Universidad lo cual predispone a su resistencia y automarginación además de que obstaculiza los procesos participativos de conducción universitaria.

Igualmente persiste, a pesar de los años, un desconocimiento del proyecto académico, de la Legislación y Reglamentación vigentes.

Por ello es fundamental superar actitudes individualistas, de defensa de privilegios y de resistencias a asumir los acuerdos de los órganos colegiados, evitando que prevalezca la negociación individual con los órganos de gestión en contra de la práctica colectiva en este sentido.

La División ha tenido una significativa evolución en los últimos lustros, sin embargo, las instancias y recursos humanos y materiales de apoyo a la gestión universitaria no son acordes a las condiciones actuales; en los hechos, las estructuras básicas de apoyo a la conducción y comunicación universitarias, así como su composición son las mismas.

En la medida en que la gestión universitaria en nuestra División tiene tres elementos fundamentales como son: la identificación y solución de problemas, la toma de decisiones, así como el cumplimiento de los fines y objetivos universitarios de la División de Ciencias y Artes para el Diseño en el concierto de nuestra institución, se busca lo siguiente:

· La promoción permanente de la democratización de los procesos de gestión académicos colectivos.

· El conocimiento y difusión del proyecto institucional, así como de su Legislación y Reglamentación, tanto por las instancias que participan en la toma de decisiones como en los que recae. Su difusión requiere de nuevos y mayores espacios que involucren a la comunidad en su conjunto.

· La actualización y profesionalización de los actores para llevar a cabo las funciones de gestión, a través de cursos que les permitan la optimización de sus actividades.

· La promoción de actividades a través de la participación colectiva y académica, así como la agregación y la no atomización de demandas de carácter personal.

· Fomentar y socializar la información y los trámites que sustentan la gestión y operación académica.

· Asumir cabalmente las responsabilidades y competencias de las instancias en los ámbitos que les confiere la legislación.

· Promover y reforzar la modernización técnica y profesional de las funciones de gestión y apoyo a la gestión universitaria a través, entre otros, de la aplicación de tecnologías de punta.

· Procurar reducir los tiempos muertos, que conduzcan a la simplificación administrativa y consoliden la desconcentración funcional y administrativa consignada en la Ley Orgánica.

EVALUACIÓN

La evaluación constituye una parte fundamental e indispensable en los procesos de planeación, programación y presupuestación, y tiene como propósito lograr que la misión universitaria se oriente a definir las medidas tendientes a fortalecer, reorientar y establecer prioridades de la misma.

La evaluación en la División de Ciencias y Artes para el Diseño comprende aspectos tanto cualitativos como cuantitativos, permitiendo retroalimentar los planes, programas y funciones universitarias.

La División debe considerar, adecuar y especificar los métodos y procedimientos para evaluar la eficiencia y eficacia del modelo a través del análisis del resultado de sus procesos. 

Resulta fundamental también evaluar las condicionantes externas del quehacer universitario, incluyendo el desarrollo profesional de los egresados, la trascendencia de los productos científicos, técnicos y artísticos y el efecto de las acciones del servicio.

En el marco de la planeación institucional, la evaluación deberá propiciar un modelo de autoevaluación que permita formular propuestas de cambio que fortalezcan la calidad, el impacto, la direccionalidad de las actividades sustantivas, la colaboración y cooperación de los procesos y el fortalecimiento de la División a través de acuerdos y consensos que propicien la vida académica y democrática de la División.


 


Documentos consultados

1. Anteproyecto para establecer la Unidad Sur de la UAM, UAM, México. (Fotocopias)

2. Anteproyecto Políticas Generales de Docencia. Políticas Operacionales de Docencia,  Colegio Académico (segunda versión), en Semanario de la UAM-X (suplemento especial), 27 de noviembre de 2000, México.

3. Bases Conceptuales de la Universidad Autónoma Metropolitana, Unidad Xochimilco, Consejo Académico 1989-1991, UAM-X, México, 1997.

4. Comentarios al Plan de Desarrollo Institucional, 1996-2001, UAM-X, México, 1997.

5. Desarrollo de la investigación en Ciencias y Artes para el Diseño, en Boletín Espacio Diseño (suplemento especial), diciembre de 1998, CyAD, UAM-X, México.

6. Dictamen que Presenta la Comisión de políticas Generales y Operacionales de Docencia, en Semanario de la UAM (suplemento especial), 1 de marzo de 2001, México.

7. El módulo, un sistema abierto , un órgano vivo, Francisco Pérez Cortés, CyAD, UAM-X, México. (Fotocopias)

8. El Proyecto Orgánico y el Modelo Xochimilco, UAM-X, México.

9. Hipótesis de la División de CyAD, UAM-X, México, 1978  (fotocopias).

10. Hipótesis sobre las funciones y la división de trabajo de los departamentos de CyAD, UAM-X, México, 1980. (Reunión de Cholula, fotocopias)

11. Legislación Universitaria, UAM, México, 2000.

12. Ley Orgánica, en Legislación Universitaria, UAM, México, 2000.

13. Plan de Desarrollo del Consejo Académico 1992-1993, UAM-X, México.

14. Plan de Desarrollo Institucional 1996-2001, UAM-X, México, 1997.

15. Plan de Estudios de la Licenciatura en Diseño de la Comunicación Gráfica, aprobado por el Colegio Académico en su sesión 182. UAM-X, México.

16. Plan de Estudios de la Licenciatura en Planeación Territorial, aprobado por el Colegio Académico en su sesión 200. UAM-X, México.

17. Plan de Estudios de la Licenciatura en Diseño Industrial,  aprobado por el Colegio Académico en su sesión 193. UAM-X, México.

18. Plan de Estudios de la Licenciatura en Arquitectura, aprobado por el Colegio Académico en su sesión 167. UAM-X, México.

19. Planes y Programas de Diseño Industrial (diseño curricular), CyAD, UAM-X, México. (Fotocopias)

20. Políticas Operacionales para Determinar Mecanismos de Evaluación y Fomento  de las Áreas de Investigación, en Semanario de la UAM, vol. II, núm. 14, 4 de diciembre de 1995; México.

21. Políticas Operacionales para Determinar Mecanismos de Evaluación y Fomento  de las Áreas de Investigación de la Unidad Xochimilco, en Boletín Informativo de la UAM, 2 de octubre de 2000 , México.

22. Programa de Desarrollo de la División 2000, CyAD, UAM-X, México, 2001. (Avances)

23. Resultados de la reunión de trabajo Para la implementación del “Programa Estratégico para el Fortalecimiento a la investigación”, UAM-X, México, 1997.


 



[1] Legislación Universitaria Marzo 2000, p.1

[2] Ibídem. p. 1

[3] Proyecto de Ley para la creación de la UAM, México, 1973, p. 7

[4] Bases Conceptuales de la UAM-X, p. 11.

[5] Anteproyecto para establecer la Unidad Sur de la UAM, p.7.

[6] Documento Xochimilco, p.11.

[7] Bases conceptuales de la UAM-X, p.13.

[8] Ver documento Cholula de 1980

[9] Ver Hipótesis de la División y Seminario de Reestructuración de la División

[10] Socialmente definido

[11] Conceptos presentados en los siguientes documentos: Bases Conceptuales de la UAM Unidad Xochimilco, Consejo Académico 1989-1991, p. 26; Plan de desarrollo Consejo Académico 1992-1993, p. 22; Plan Táctico para el Fortalecimiento y Desarrollo de la Docencia, 1998. pp. 11 y 12;  El perfil de egresado de los diferentes programas académicos de CyAD.

[12] Entendido actualmente como aquel que toca a otras disciplinas diferentes al diseño

[13] Lo que permite integrar enseñanza y aprendizaje

[14] Bases conceptuales de la UAM-Xochimilco.

[15] Bases Conceptuales de la Unidad Xochimilco.

[16] Bases Conceptuales UAM-X, Consejo Académico 1989-1991, p. 21-23.